Seminario Mary Ray

Debió de ser estupendo y seguro que todo el mundo aprendió un montón y lo disfruto muchísimo, menos yo. Ya que en esos momentos estaba tirada en la carretera, concretamente en el túnel de Guadarrama, pensando esto no puede ser verdad. Pues sí era verdad y la cosa fue así:

Kiba y yo nos levantamos a las 6 de la mañana con intención de ir a Madrid al Seminario de Mary Ray, para poder aprender los secretos del clicker, montamos en el coche y tomamos carretera a Madrid. Todo iba bien hasta que después de pagar la autopista el coche dijo basta, hasta aquí hemos llegado, así que tranquilamente fue reduciendo la velocidad él solito, parando en mitad del túnel, allí estamos Kiba y yo pensando ¿Que pasa?, parados en el túnel, y gritar SOS.

Entre en la cabina de SOS y después de leer las instrucciones de uso, pues llamé, espere y nadie decía nada, así que volví a llamar y ya una voz me dijo, "Tranquila, que ya van para allá", a los pocos segundos de salir de la cabina allí estaban dos chicos de Iberpistas, viendo mi cara de panoli y me preguntaron:

Iberpistas: ¿Que ha pasado?
Menda: Que se ha parado el coche. (Cosa razonable sino yo no estaría aquí sino en el Seminario ¿no creen?, pero bueno)
Iberpistas: Hay que retirar el vehículo para atrás, donde lo pueda enganchar la grúa.
Menda: Y eso como lo hacemos el freno es eléctrico, no se puede mover.
Los chicos se miraron (pensando: ¡Esto es nuevo!) y dijeron
Ibertpistas: Saca el manual de coche.

Y allí estábamos los tres, en medio del túnel con un frío que pelaba, buscando en el manual como se quitaba el freno de mano. Finalmente lo encontramos (ya sabes no te acostarás sin saber una cosas más) y entre los tres movimos el coche. Le tengo que agradecer a los chicos de iberpistas su comprensión y su apoyo ya que hicieron que el rato fuera más ameno y menos traumático.

Al rato llegó la grúa, montamos el coche y yo me fui por fin de allí, a la tan conocida base en este mundo de las grúas, al rato nos pusieron un taxi a Kiba y a mi, para volver a casa (todo esto en 6 horas).

Mi pobre compañero de viaje que se comporto como un rey, no dijo nada y no entendía nada pero ahí estaba el tranquilo y conmigo. Y cuando llegamos a casa se fue a su cama a dormir diciendo: "la próxima vez vas tu sola".

Y este fue mi maravilloso viaje relámpago a la comunidad de Madrid.